Ladies Night IX La Editora Escribe!

Antes de dejarlos con el artículo de nuestra querida editora, tengo que agradecer a todos los fans del blog por sus mensajes del FB y en el MSN. En definitiva el blog no puede morir, como me dijeron antes de publicar este artículo: "No es tu obligacion deleitar a la hinchada, pero publica!". Bueno en definitiva si es mi obligación hacerlo.

Como verán el titulo del post es acerca de "cibercupido" en todo caso de existir (infaltable con la tecnología de hoy) que ganas de hackearlo e injertarle cuanto bicho, troyano, gusano, bot y demás maleficios ciberneticos existan!

Luis DC.

CIBER CUPIDO: ¿Existe? (Por: La Editora)

Tomé la decisión de darme mi tiempo sabático (indefinido), disfrutar de mis amistades, mi familia y los viajes que estoy haciendo últimamente. No quería enamorarme, ilusionarme, ni nada que se le parezca, y no se trata de que no quiera darme la oportunidad de conocer a una persona especial que tal vez sea mi complemento casi perfecto, NO; nada de eso…Simplemente me di cuenta que recién ahora dispongo de tiempo para mi, que todo ha tomado su curso, disfruto de lo que soy y lo que tengo, puedo hacer y deshacer, puedo gastar y despilfarrar. En conclusión: Tengo el timón de mi barco!!!............. Pero no imaginé que el enano pendejo me seguiría y hasta se metería en el ciberespacio, con tal de poner la punta de su flecha en mi sien.

Mayormente, las personas cuando salimos de viaje queremos conocer, aparte de los lugares nuevos, gente. Y tal vez ¿por qué no?, tener un affaire por ahí. Utilizamos muchas artimañas, como la popular… ¿me puedes tomar una foto? para luego hacerle el habla al chico guapo, y molestamos su atención durante todo el paseo…. En mi caso, al menos esta vez, yo misma me tomaba fotos y cuando se ofrecían a tomármelas o acercarse a mí, simplemente me apartaba. La tentación era inmensa, no saben cuánto, ya que me encontraba en la ciudad imperial del Cusco, popular por su majestuoso Machu Picchu pero también por la diversidad y cantidad enorme de turistas que puedes encontrar.

Pasé mi año nuevo en plena Plaza de Armas, dando de gritos, cantando y saludando a todos como si nos conociéramos de siempre…. Me bañaron con cerveza, whisky, ron, vodka y Dios sabe con qué licor bendito más… la fiesta estaba dada; luego partimos a un recorrido por las discotecas más bulliciosas. Pasado ese día de jolgorio festivo, por obvias razones, al día siguiente descansé casi todo el día, porque en la noche volvía a armarse la parranda y empezábamos con el famoso dicho: “Licor bendito, dulce alimento, qué haces afuera, métete adentro….salud!”. Supuestamente tenía que dormir temprano, porque el auto que me recogía para llevarme a la estación del tren que me llevaría a Machu Picchu, pasaba por mí a las 7am. La noche parecía no terminar, bailaba sin parar y hacía algo de vida social acompañada por unas amigas. Cuando me di cuenta eran las 5am, entonces salí disparada de la disco y, luego de pasar a comer algo, me fui al departamento a bañarme, cambiarme y coger mi mochila viajera.

Me demoraría demasiado contarles todo lo que viví en Aguas Calientes, Machu Picchu y Huayna Picchu, por eso solo les pondré una fotito para que usen su imaginación.

Regresé a la ciudad del Cusco luego de dos días, decidí salir con mis primos que viven en esta ciudad antes de tomar mi vuelo de retorno a Lima. Esa noche conocí un restaurant muy elegante y pomposo, gracias a la invitación de mi prima favorita “Chatita”, luego nos fuimos por unos piscos sours a La Bondiet para finalmente, reunirnos con 2 primos más en una discoteca muy conocida situada en la plaza de armas. El reloj daba las 11pm, mi vuelo salía a las 6:30am, entonces sumando, restando, multiplicando y elevándolo al cubo, me quedaba algo de 5 horas para bailar y gozar antes de pisar el aeropuerto….. Empezamos con mojitos, luego fue cuba libre y luego…ya no recuerdo bien…. Para bajar un poco el trago, bailábamos como descocidos, hasta que a Raúl (mi primito) se le ocurrió sacar la cámara fotográfica y digitalizar ese momento, el problema es que nos teníamos que turnar para tomarnos las fotos.

De pronto sentí que “algo” jaló mi atención hacia la puerta de entrada de la discoteca, fue cuando vi que entraba un grupo de chicos, uno de ellos se caracterizaba por ser el más alto, fue como si telepáticamente me hubiese pasado la voz. No le quise dar mucha importancia y seguí festejando con mis primos. Al cabo de unos minutos Raúl, nos estaba tomando una foto y este chico, alto y además guapo, se acercó y le dijo que él nos tomaba la foto a todos, entonces Raúl le dio la cámara. Nos tomó un par de fotos y luego le preguntó a Raúl: ¿puedo bailar con una de tus amigas?, Raúl le contestó que Sí….entonces me sacó a bailar, creo que fueron dos canciones las que bailamos, no recuerdo bien, porque tan pronto salimos a la pista de baile empezamos a hablar y hacernos las preguntas clásicas: nombre, edad, estado civil, fecha de retorno a tu país, etc….. Le dije que ya estaba por irme –el reloj marcaba un poco más de las 4am- con su acento francés pero muy buen manejo del español, me dijo que era imposible que me fuera porque recién nos estábamos conociendo. Por más que insistió en quedarme (y casi lo consigue), lamentablemente no podía más, entonces le dijo a Raúl: Por favor ¿puedes tomarnos una foto? (en realidad fueron dos), acto seguido me dio su correo electrónico para pasarle nuestras fotos, hasta ahí todo bien, pero corté un pedazo de papel y también le puse mi dirección de correo (cosa que no hago, a menos que haya pasado buen tiempo con esta persona o que hayamos compartido parte del viaje) pero bueno, así fue, ¿el destino, who knows?)

Camino al aeropuerto no dejaba de pensar en este chico, me daba curiosidad por saber más de él, me pareció medio enigmático, no sé cómo describirlo. Llegando a Lima, subí mis fotos del viaje y cuando vi mi foto con él dudé en escribirle un correo, al final, me decidí y se lo envié al cabo de unos días. Un correo muy simple con las fotos adjuntas. Luego nos agregamos al Messenger, luego empezamos a chatear, luego me dijo que venía a Lima pero sólo por 1 día. El destino quiso que no nos veamos en esa oportunidad porque yo tenía clases hasta muy tarde y él ya se iba con destino a Ecuador.

El tiempo fue pasando y las sesiones de chat eran más seguidas, en una de ellas me pidió mi número de teléfono, como ya había pasado un tiempo de estar chateando, creí conveniente darle el número de mi móvil. Me sorprendió mucho su llamada y me sorprendió más que lo hiciera seguido. Empecé a sentir algo especial por él y creo que él también por mí, ambos esperábamos ansiosos el poder conectarnos o hablar y poder vernos. Me hizo mucha gracia el poder descubrir programas que te permiten hacer teleconferencia y hasta llamar a todo el mundo por muy poco dinero, todo esto él me lo fue enseñando y yo lo aprendí muy bien :D.

Todo estaba perfecto, él dejaba Ecuador en menos de una semana, visitaba unos días Colombia y luego regresaba a Lima para nuestro gran reencuentro. Cuando me contó que viajaba a Colombia le dije que yo había estado el año pasado por ese país y, la verdad es que el slogan que usa Colombia es 100% cierto. “Colombia: el riesgo es que te quieras quedar”…. Le di los nombres de algunos lugares que había visitado, sobretodo en el Caribe, y también lo contacté con mi querido amigo Jairo para que lo busque en Santa Marta. ¿Qué creen que pasó?.... Se enamoró de Colombia!!!! Ya casi ni podemos hablar porque para en lugares muy exóticos donde no hay ni electricidad, ahora piensa quedarse un par de meses más por allá y bueno, quién sabe.

Hoy hablé con él después de casi una semana sin comunicación… Me alegró mucho escuchar su voz y todas esas cosas lindas, tiernas y dulces que sabe decirme…. Ya sé que me van a decir que es el floro clásico que usan los hombres, pero a pesar que puede ser cierto, me gusta escucharlo y me hace sentir bien. Tengo muchas ganas que se aburra de Colombia y regrese pronto a Perú, pero también sé que lo está disfrutando tremendamente y no quisiera cortarle la experiencia que está viviendo en el Caribe. Mil y un cosas me pasan por la cabeza, la verdad es que lo tengo presente todos los días, pienso qué estará haciendo, qué maravillas estará conociendo, si ya tendrá ganas de regresar, etc, etc.

A todo esto, también tengo muchas interrogantes: ¿Qué es esto? ¿Sólo ilusión? ¿Debo seguir con todo este rollo? ¿Qué hace que me guste? ¿Creer o no creer? ¿Cómo protegerme de algo desconocido? ¿Te ha pasado a ti? Si es así, ¿Qué hiciste? ¿Cómo terminó todo?... vamos, atrévete a contarnos tu experiencia….

Son casi las 3 de la madrugada y no podía dormir sin antes escribir esta historia, una más en mi vida, de las tantas que vendrán. Y sigo aquí, soñando despierta.